Una vez más me encuentro sin saber porqué; esto no es vida. Mi cuerpo cansado no puede dormir, mi mente estancada repite tu nombre, una grabación que no parece tener final, como un laberinto que parece no terminar.
Mi corazón tampoco parece sesar porque aun sin latidos arde en mi pecho, mis manos te buscan y mis ojos te imagina, mis sueños también te desean.
Ya sólo mis lágrimas entienden porque mi cuerpo tiembla, y el espejo refleja todo lo que te necesito.
Soplo al viento mis anehlos y maldigo tus decisiones, trato de encontrar la manera de parar: de no quererte más.
No hay canción que no me hiera, no hay sentimiento que no te refiera, ni pensamiento que te desligue, estar sin ti es tan disfuncional, como una balada triste o un árbol sin hojas. El covertor no calienta, las películas no distraen, las paredes blancas de mi cuarto sólo representan tu silencio y mi locura.
Las estrellas no cantan porque temen de mi llento, y la luna sólo alumbra mi soledad. Encuentro rejas a donde quiera que voy, estoy encerrada en mi propia anciedad.
Mi maquillaje jamás podrá esconder mis emperfecciones, ni una sonrisa podrá atentar mi infelicidad, sólo las rocas pueden entender mi dureza y mi frialdad, pero mínimo ellas se calientan con el sol.
Me he convertido en una estatua vacía y parada, sin nada que decir ni a nadie a quien ver. Busco la manera de pretender tranquilidad, pero mi mirada delata mi inquietud y mi desgracia, Sólo mi fuerza de voluntad me impacta, sólo ella me detiene y sólo ella me hace razonar, aveces me susurra que éste no es el final. Mientras espero voy como sonánbula por la vida, sin reir y sin sentir más que tu ausencia. Me pesa tanto la distancia y me duele tanto el desamor.... Esto no es vida.
viernes, 24 de septiembre de 2010
jueves, 9 de septiembre de 2010
Te espero.... pero no para siempre.
Siempre esperaré a que cuando suene mi celular seas tu. Siempre esperaré que cuando llegue a mi casa estés esperándome con las luces prendidas. Siempre esperaré que algún día me sorprendas con flores o con chocolates. Siempre esperaré a que cupido no se haya equivocado. Siempre esperaré a que robes mis alientos. Siempre esperaré a que hagas temblar mis rodillas. Siempre esperaré a que personifiques mis sueños. Siempre esperaré a que lo primero que vea sea a ti al empezar mi día. Siempre esperaré que tu mirada acabe mi noche. Siempre esperaré a que entiendas mis lágrimas. Siempre esperaré a que tomes mi mano. Siempre esperaré a que acaricies mi piel. Siempre esperaré a que me sorprendan tus ideas. Siempre esperaré a que me abraces cuando me aguite. Siempre esperaré a hacerte reír cuando estés de malas. Siempre esperaré a sorprenderte con mi espontaneidad. Siempre esperaré a que mis ojos roben tus suspiros. Siempre esperaré a que mis brazos se encuentren contigo.
Te espero... sentada.
Te espero... sentada.
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